¿Qué pasaría en Lima tras un terremoto de 8 grados?
Continuando con la idea de un posible terremoto de gran magnitud en Lima, te dejamos con una nota del portal de terra dónde se explica qué pasaría en cada zona específica , visto a través de una gran cartografía.
Si quieres verlo de cerca, no te puedes perder la exposición Terremoto en Lima en la sala Miró Quesada que estará abierta al público hasta el próximo jueves 7 de febero donde habrá una interesante charla y discución por el cierre de la muestra. Más adelante te daremos detalles de esta conversación.
La entrada es gratuita y las puertas abren a partir de las 11 de la mañana¿Qué pasaría en Lima tras un terremoto de 7.9 grados?
Un sismo de más de 7 grados en la escala de Richter con epicentro en Lima tendría un efecto devastador: miles o millones de pérdidas humanas y materiales marcarían el inicio de un largo proceso de reconstrucción nacional. Eso se sabe. Pero, quizá, no exista plena conciencia sobre qué tanto está preparada nuestra sociedad para afrontar una crisis de tal magnitud.
La exposición “Terremoto (en Lima)” aborda ese punto, indaga en una posible respuesta frente a un sacudimiento probablemente aún más fuerte que el sísmico: el terremoto social.
La figura de un cataclismo es aprovechada para detectar y examinar las grietas sociales de nuestro país. Para Sandro Venturo y Daniela Rotalde, miembros del grupo Toronja y directores de la muestra, no hay mucho que adivinar, solo basta observar hacia atrás para ver los patrones de comportamiento que exhibimos durante conflictos sociales y momentos de crisis.
¿Cómo reaccionaríamos ante el desastre?
La instalación que se presenta hasta el 7 de febrero en la Sala Luis Miró Quesada Garland de Miraflores, propone una mirada profunda sobre las consecuencias de un sismo social provocado por un evento catastrófico, que va más allá de edificios colapsados y tsunamis arrasadores. ¿Qué pasaría, entonces? “Probablemente lo que sucedió en Conga, Espinar, La Parada, y otros conflictos. Se evidenciaría la falta de autoridad, la falta de institucionalidad. Vivimos un terremoto constante y no nos damos cuenta”, relata Sandro Venturo, en diálogo con Terra Perú.
La exposición cuenta con fotografías, videos, infografías, reportes periodísticos (incluida una edición especial de Caretas) muy bien elaborados, que desvelan el probable escenario de un terremoto real, basado no solo en ficticias proyecciones, sino también en cálculos y estudios realizados por expertos como Hernando Tavera, director de sismología del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Ronald Woodman, director del IGP, Marcial Blondet, catedrático de la Universidad Católica y especialista en ingeniería sismorresistente; entre otros.
Sorprende y hasta provoca escalofríos la cronología de eventos que se producen luego de ocurrido el terremoto; así como la llamada cartografía del desastre, que muestra los lugares más afectados de la capital tanto por el movimiento telúrico, como por el tsunami.
Dos grandes problemas
La natural colisión de las placas que causa un sismo no es el único desencadenante de una crisis social. Para los autores del proyecto, existen dos palabras que definen bien las taras más complejas que impiden salir airosos no solo de un desastre natural, sino de los conflictos que se hallan incrustados en el Perú y que son cotidianamente palpables: la informalidad y la desconfianza.
La informalidad ha permitido que Lima y el Perú crezcan de manera desordenada. En nuestra capital hay muchísimas edificaciones construidas sin seguir las normas formales de ingeniería y han convertido a zonas enteras en trampas mortales en el caso de un gran sismo. Esa es solo una arista de este problema. “Debemos atacar la informalidad porque es el enemigo”, asevera Venturo.
La desconfianza, por otro lado, constituye el otro duro rival que se debe enfrentar. “La gente no confía en el sistema, por eso el sistema político no funciona. Hay mucha desconfianza, gente que rechaza lo que se hace. Hay personas que tienen diferencias porque que no se escuchan, que si realmente se prestaran atención se darían cuenta que su problema sí tiene solución. Sí es posible trabajar por un bien común, por oportunidades para todos”, señala Daniela Rotalde.
Vale la pena darse una vuelta
Tanto para tener más información sobre la condición sísmica del Perú como para reflexionar sobre los problemas sociales que nos disgregan, resulta importante asistir a esta exposición que vio la luz gracias a la colaboración de artistas, comunicadores y especialistas.
Además de Sandro Venturo y Daniela Rotalde, también participan Jerónimo Pimentel, Rafael Freyre, Arturo Higa, Santiago Palazzesi, Goster-José Antonio Mesones y Daniel Torrealba (Makaco).
Dato importante:
Para la clausura de la instalación (7 de febrero), los organizadores tiene planeada la realización de conversatorios en los que se abordarán los dos ángulos antes mencionados: la vulnerabilidad de Lima ante un terremoto y el terremoto social. Intervendrán varios de los expertos que colaboraron en la muestra.